Cuando necesitas hacer una compra o pagar una factura y no tienes dinero en efectivo a mano, hay algunas opciones para conseguir los fondos que necesitas. Dos de las opciones más populares son una tarjeta de crédito o un préstamo personal. La elección de la mejor opción dependerá de una variedad de factores, y es importante comprender los términos de ambos tipos de financiamiento.
¿Cuál es la diferencia entre una tarjeta de crédito y un préstamo personal?
Una tarjeta de crédito es una línea de crédito rotativa que puede utilizar en cualquier momento hasta su límite de crédito. Se requiere que haga un pago mínimo cada mes, y tiene la opción de pagar más o cancelarlo cada mes. Si tiene un saldo, se le cobrarán intereses.
Un préstamo personal es una cantidad fija que se pide prestada y se devuelve en cuotas iguales durante un cierto tiempo. Se le cobra un interés mensual desde el momento en que firma el papeleo y recibe el dinero. En la mayoría de los casos, puede devolver el préstamo antes de que termine el plazo sin ninguna penalización.
Las tasas de interés de las tarjetas de crédito suelen ser más altas que las tasas de interés de los préstamos personales, aunque algunas tarjetas ofrecen un interés cero o bajo durante un período introductorio. La tasa que se le ofrece en una tarjeta de crédito o préstamo personal dependerá de su puntaje crediticio.
Tarjetas de crédito: Pros y contras
Las tarjetas de crédito son una forma conveniente de financiación porque se adquieren fácilmente, sobre todo si se tiene un buen crédito. Puedes sacar una tarjeta de crédito con antelación y tenerla a mano cuando la necesites.
Este tipo de financiación tiene ventajas:
Algunas tarjetas de crédito ofrecen tasas introductorias bajas, durante las cuales no se cobran intereses.
Las tarjetas de crédito son ampliamente aceptadas, lo que hace que sea rápido y fácil completar una compra.
Cuando se paga una parte del saldo de la tarjeta de crédito, se tiene la oportunidad de volver a pedirlo prestado sin tener que volver a solicitarlo.
Algunas tarjetas de crédito ofrecen recompensas o beneficios a los titulares, como billetes de avión gratuitos o garantías ampliadas de los productos.
Las tarjetas de crédito tienen desventajas:
Si no eres disciplinado, puedes seguir aumentando tu saldo, lo que hace difícil salir de la deuda.
Si eliges una tarjeta con un período introductorio de cero o bajo interés y no la pagas antes de que termine la promoción, tu tasa de interés podría terminar siendo más alta que la de un préstamo personal.
Las tasas de interés de las tarjetas de crédito pueden aumentar.
Préstamo personal: Pros y contras
Un préstamo personal le permite tomar una suma global y devolverla con el tiempo. Puedes usarlo para cualquier propósito, como la compra de un vehículo, hacer mejoras en la casa o consolidar la deuda.
Esta estructura de préstamo ofrece algunas ventajas:
Los préstamos personales tienen un costo por adelantado para que entiendas los intereses y las cuotas antes de usar el dinero.
Los préstamos personales tienen pagos mensuales fijos que pueden ayudarte a establecer y mantener un presupuesto.
La mayoría de los préstamos personales tienen un plazo que va de uno a cinco años.
Los préstamos personales suelen ofrecer tasas de interés fijas.
En la mayoría de los casos, usted puede pagar un préstamo personal antes de tiempo sin penalización.
Siempre y cuando haga sus pagos regulares, un préstamo personal será pagado al final del término.
Los préstamos personales tienen desventajas:
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Los préstamos personales pueden ser más caros que las tarjetas de crédito si el prestamista cobra tarifas basadas en el saldo.
A diferencia de las tarjetas de crédito que ofrecen un período introductorio con cero interés, los préstamos personales no ofrecen opciones sin interés.
Las tasas de interés de los préstamos personales pueden ser más altas que las de los préstamos garantizados, como los préstamos para automóviles o las hipotecas.